14 de febrero: Día de San Valentín, los amantes esperan todo el año para declarar su amor en esta fecha. Así ocurre en todo el mundo, y bueno, Cuba no está exenta de ¡tan grandioso acontecimiento!
Semanas antes del día señalado puedes ver a las parejas buscando el regalo perfecto con el cual agasajar al ser amado. Las tiendas se abarrotan de Romeos y Julietas atormentados, quienes compiten por el objeto más valioso en oferta.
Un mar de perfumes, maquillajes, cajas de bombones empaquetados como toda una obra de arte dejan ver sus lazos rosas entre las estanterías.
Ni hablar de los vendedores ambulantes con su carga de flores de cristal, peluches y cuanta cursilería que les reporte ganancias. O los negocios de impresión y tiendas que se publicitan en las redes sociales ofreciéndote el “regalo ideal”, y con servicio a domicilio incluido.
Sí, sí, la postal más brillante es la indicada, esa la cual revela en letras doradas cuánto privilegio sentimos por estar con ella o él, aquí no valen los simples papelitos donde sean los sentimientos los que verdaderamente discurran.

Bueno, y ni hablar, de las colas kilométricas y las llamadas constantes para reservar una mesa en el restaurante más caro; se necesita reunir todo el año para vaciar el bolsillo en una noche, claro, la love night.
A tono con los nuevos tiempos nada mejor que una velada en el Betty Boom de Playa, Antojos en la Habana Vieja o El Cocinero ahí, justo al lado de la FAC.

Para muchos resulta el día de mostrar la máscara del “te amo”, aunque el resto del año olvidaran ser leales a ese “gran amor”. Más que una cuestión de amantes se ha tornado una imposición social, una hipocresía, donde eres rechazado si no actúas según estos preceptos.
El querubín de las flechas no deja de revolotear en la pantalla chica y refleja cómo el día de San Valentín olvida la tradición para convertirse en negocio.

Después de todo no estamos tan lejos como pensamos del tan criticado modelo de vida norteamericano. A fin de cuentas, las noches bajo las estrellas y un sincero te quiero ya pasaron de moda.
