En la mañana de hoy recibimos la noticia, de la voz del Doctor Francisco Durán, que Cuba tiene otro récord de casos confirmados en una jornada: 344. Nuestro pico no baja.
El país entró a este 2021 en estado de alarma, apenas ocho días han transcurrido y ya tenemos altos número de casos confirmados. Algo está fallando.
Las provincias orientales elevan el total de personas contagiadas con esta enfermedad, aunque La Habana sigue encabezando la lista de provincias con mayor número de contagios.
Un gran número de personas enfermas no presentaron síntomas cuando fueron detectadas. ¿Qué hacer? Pues, queda claro, como al inicio de conocer la existencia de la Covid-19 en el país, la necesidad de extremar las medidas higiénico-sanitarias y mantener el distanciamiento social.
Consejo de Defensa de La Habana toma medidas, ¿serán suficientes?
Desde el día de ayer y ante la compleja situación epidemiológica de La Habana, el Consejo de Defensa Provincial (CDP) dio a conocer un grupo de medidas para disminuir la proliferación de la Covid-19, entre ellas se encuentran: reducir las actividades públicas, desconcentrar puntos de venta de productos, mantener las restricciones en bares y restaurantes, regular el acceso de familiares al aeropuerto, prohibición de las visitas a instituciones hospitalarias y mantener el mismo acompañante durante el tiempo de estadía del paciente.
Además, se prevé el retorno de las pesquisas con los estudiantes de Ciencias Médicas para detectar nuevos contagios. Asimismo, se acordó que todo paciente deberá recibir un aval que certifique el resultado negativo de su PCR.
Debemos destacar la aplicación del Nasalferón a 62 viajeros y sus convivientes de los municipios Boyeros y Diez de Octubre, medida que continuará como parte del protocolo para llegar a los grupos más vulnerables.
El comportamiento negativo de muchos ha influido en toda la nación. En medio del ordenamiento económico nos olvidamos que para poder subsanar estos errores necesitamos estar vivos y, lamentablemente, la Covid-19 puede arrebatarnos la vida y la de nuestros seres más allegados.
Cuba lleva varios meses con la “aparente normalidad”, que no es tan normal ni tan aparente; ahora, sus casos se han disparado y la indisciplina continúa. Guaguas abarrotadas de personas, colas desde tempranas hasta altas horas del día, fiestas para nada privadas, incorrecta utilización del nasobuco, establecimientos gastronómicos que no cumplen con lo requerido, en fin … la lista puede seguir, como mismo sigue aumentando la lista de contagios.
Todo período presenta su palabra clave, la palabra de orden, en este, sin lugar a dudas, es la responsabilidad. Y, ¿dónde está?