La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) informó en su último balance que más de 423.300 personas fueron desplazadas en la Franja de Gaza a consecuencia de los bombardeos israelíes contra áreas civiles.
En un reporte actualizado, la entidad precisó dos tercios de los 423 mil (270.374) hallaron refugio en escuelas de la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (Unrwa).
Agregó que diversas agencias humanitarias acogen a los desplazados en esta red de escuelas, apoyan a quienes permanecen en otras instalaciones y distribuyen alimentos y otros suministros básicos.
De acuerdo con OCHA “en total 1.417 (palestinos) muerieron y 6.268 resultaron heridos en Gaza desde el 7 de octubre, además 33 asesinados y 500 lesionados se sumaron a la lista debido a actos de violencia de los soldados y colonos israelíes en Cisjordania.
Según el Ministerio de Obras Públicas de Gaza, “quedaron destruidos 752 edificios residenciales y no residenciales, que comprenden 2.835 viviendas. Otras 1.791 viviendas sufrieron daños irreparables y quedaron inhabitables”.
Al ampliar detalles sobre la situación humanitaria, la OCHA recordó que Israel cortó el suministro de agua, combustible, electricidad y alimentos. Debido a la falta de energía, han cerrado cuatro de cada cinco plantas de tratamiento de residuales y 53 estaciones de bombeo de aguas residuales, de 65, no funcionan.
La escasez de agua, considerada grave, afecta a más de 650.000 personas y las tres plantas que tratan agua de mar para fines de consumo (producían 21 millones de litros de agua potable al día) están completamente paralizadas. Asimismo, la falta de electricidad genera altos niveles de inseguridad alimentaria, al generar escasez de oferta.
El informe, del ente perteneciente a la ONU, señala que los 13 hospitales de Gaza están parcialmente operativos, pero sus generadores de respaldo pronto agotarán su reserva de combustible y hacen frente a un déficit grave de suministros médicos. En especial, se afectan los recién nacidos en incubadoras y pacientes con necesidad de oxígeno, entre otros.