En un fallo emitido por el juez Arthur Engoron en Nueva York, se determinó que Donald Trump cometió fraude durante años mientras construía su imperio inmobiliario, que eventualmente lo catapultó a la fama y a la Casa Blanca.
El juez encontró que el expresidente y su compañía engañaron a bancos, aseguradoras y otros actores al sobrevalorar significativamente sus activos y exagerar su patrimonio neto en la documentación utilizada para hacer negocios y asegurar financiamiento.
Asimismo,señaló que más allá de simplemente alardear de sus riquezas, Trump y su empresa mintieron repetidamente en sus estados financieros anuales, obteniendo beneficios como términos favorables en préstamos y primas de seguro más bajas.
También determinó que estas tácticas cruzaron una línea y violaron la ley, rechazando el argumento de Trump de que una exención de responsabilidad en los estados financieros lo absolvía de cualquier delito.
Los fiscales de Manhattan habían considerado presentar un caso penal por la misma conducta, pero finalmente decidieron no hacerlo. En su lugar, el fiscal general de Nueva York, Letitia James, presentó una demanda civil contra Trump y busca sanciones que podrían afectar la capacidad de Trump y su familia para hacer negocios en el estado.
El fallo de Engoron, en una fase del caso conocida como juicio sumario, resuelve el reclamo central de la demanda de James, pero quedan otros seis reclamos por decidir. Está programado que el juez celebre un juicio sin jurado a partir del 2 de octubre para evaluar esas reclamaciones y determinar los castigos que podrían imponerse. James busca multas por valor de 250 millones de dólares y la prohibición de que Trump haga negocios en Nueva York, su estado natal. El juicio podría extenderse hasta diciembre.
Los abogados de Trump habían solicitado al juez que desestimara el caso, alegando que James no tenía fundamentos legales para presentar la demanda y que muchas de las acusaciones estaban prescritas. Sin embargo, el juez negó su solicitud.
La demanda presentada por Letitia James en septiembre del año pasado es el resultado de una investigación civil de tres años sobre Trump y su organización. Además de la familia del expresidente, dos ejecutivos de la Organización Trump, Allen Weisselberg y Jeffrey McConney, también están mencionados en la demanda.
